La crisis que todavía respira

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La principal causa de la crisis económica de 2008

Para que todos podamos comprender la crisis económica de 2008, primero comenzamos definiendo qué es. Pues bien, la crisis económica es la fase del ciclo económico en el que se da escasez en la producción, comercialización y consumo de bienes y servicios y que por lo tanto produce un decrecimiento considerable en la economía. Las dos características que podemos destacar de la crisis económica es, por un lado, la inestabilidad que provoca en los mercados; y por otro, las consecuencias que tiene en los sectores donde comienza y posteriormente en el conjunto del sistema.
¿QUÉ PRODUJO LA GRAN CRISIS QUE AÚN PALPITA EN LA ACTUALIDAD?
Todo parece indicar que, lo orígenes de la crisis estarían asociados a boom de créditos, en el mercado inmobiliario, y a burbujas de precios de activos financieros. Hace más de una década, la quiebra de uno de los principales bancos de EE. UU, el Lehman Brothers, provocó que los bancos y el mundo general fuera invadido de desconfianza e incertidumbre, por lo que los bancos no se arriesgaban a prestar dinero. Inversores, clientes perdieron la confianza en los bancos queriendo retirar sus depósitos. La crisis de confianza pasó a ser una crisis financiera a escala global y tuvo un efecto veloz en todo el mundo. Las consecuencias son visibles a pesar de que los años pasan. La principal es conocida como income inequality, que sostiene la desigualdad de los ingresos. Según afirma Díaz-Cardiel “En los 10 años de recuperación económica, el 1% de la población con mayor poder adquisitivo se hace mucho más rica y el 99% restante se convierte en más pobre. Eso se traduce en la desaparición de la clase media en muchos países de occidente”.
En total unos 24 países fueron víctimas de las crisis bancarias y en el caso de España la actividad económica aún ha retomado su curso. Los colectivos más vulnerables han sido y siguen siendo desempleados, niños, ancianos y población inmigrante. Una de las consecuencias peores fue la el aumento del populismo tanto de extrema derecho como de izquierda.
Como afirman muchos economistas, en este caso José Luis Peydro, se producirá una nueva crisis, es más parece que nos vamos adentrarnos en ella. Desde aquel momento la deuda global no ha parado de subir y hay mucho riesgo en los países emergentes. Para controlar y afrontar mejor esta situación, es necesario la supervisión y regulación financiera correcta.

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